EL ALMIDÒN RESISTENTE Y LA SALUD

 

¿Sabes que es el almidón resistente de los alimentos y cómo beneficia tu salud?

El almidón resistente es la reserva de glucosa de algunos cereales, legumbres, tubérculos, frutas y verduras. Se diferencia del almidón normal porque, como su nombre indica, presenta resistencia a la digestión y viaja entero por nuestro intestino y se convierte en un prebiótico excelente para tus bacterias intestinales.

Es ideal para alimentar nuestra microbiota, CLAVE DE NUESTRA SALUD.

¿Qué conseguimos comiendo almidón resistente?

Si incrementamos en nuestra dieta almidón resistente podremos ir mejor al baño, tengamos más sensación de saciedad y podamos regular el peso y la grasa corporal de glúteos y abdomen.

Al cabo de tres semanas consumiendo estos alimentos ricos en almidón resistente, aumentarán tus Ruminicoccus bromitii, Eubacterium recticale, Faecalibacterium praunitzii y Akkermansia, que son bacterias relacionadas con el sobrepeso y la depresión. Además de ayudar a regular y equilibrar las hormonas y sobre todo reducir la actividad de la Aromatasa, la encargada de fabricar los estrógenos, una enzima localizada en el retículo endoplasmático de las células que fabrican estrógenos y tiene un papel principal en su fabricación y en nuestra salud.


¿Qué alimentos son los más aconsejables y nos aportan mejor almidón resistente?

Debemos priorizar alimentos ricos en almidón resistente y que, además, tengan un índice glucémico bajo para que no engorden y nos ayuden a perder peso.

Por ejemplo, todas las legumbres cocinadas y enfriadas, con especial atención en las lentejas, guisantes, alubias y azukis.

Los cereales, con índice glucémico bajo como trigo sarraceno, quinoa, avena, amaranto.

La fruta, preparada en compota o al horno. El plátano macho es ideal.

Tubérculos, patata, yuca (mandioca y tapioca) boniato.

La clave para que estos alimentos se transformen en súper alimentos es cocinarlos 24 horas antes de su consumo, dejando enfriar en la nevera y después al consumirlos no calentarlos demasiado, así mantienen todas sus propiedades. 

Ejemplo de alimento beneficioso

Podemos preparar una ensaladilla rusa con patata, guisantes, tubérculos y todos los ingredientes que más te gusten o una tortilla de patata, la clave es prepararlos 24h antes y guardar en la nevera, así conseguimos que el almidón cristalice y se convierta en almidón resistente e indigerible con efecto prebiótico, mejorando así nuestra salud intestinal, endocrina y hormonal.

¿Qué ocurre con el almidón en nuestro organismo?

Si cocinamos los alimentos con agua o a altas temperaturas, el almidón es más digerible y se absorbe en el intestino delgado, lo cual provoca un aumento de glucosa en sangre. Esta glucosa se almacena en forma de glucógeno en el hígado y el músculo que sirve de sustrato energético, es decir, de reserva energética para ser utilizada en caso de necesidad, o en caso de sedentarismo, se acumula en la barriga y los glúteos ocasionando un aumento de los triglicéridos y de peso. Si después de cocinar estos alimentos ricos en almidón los dejamos enfriar 24h esos cristales de almidón se transforman en prebióticos muy saludables.

Si sufres estreñimiento y quieres mejorar tu tránsito intestinal no dudes en cambiar tus hábitos culinarios y podrás ver la diferencia en una semana.



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